Dos noches antes las elecciones en EE.UU, la película sobre la localización y asesinato de Osama Bin Ladin se estrenó, recordando el votante americano del gran logro contra este terrorista internacional que amenazaba la seguridad y el bien estar de los americanos a través de los continentes y desde escondites y cuevas. La película demostraba a los votantes los esfuerzos y la eficacia de la administración de Obama en lograr el objetivo de seguridad nacional contra cualquier amenaza. Benjamín Netanyahu, el protegido americano, parece utilizando la misma táctica antes las elecciones legislativas en enero 2013: demostrar a los israelís el poder del gobierno actual en desarraigar los militantes de Hamas que amenazan la seguridad nacional israelí. Al Qaida es indudablemente una amenaza de la seguridad internacional y americana en particular. Pero no es el único problema que enfrenta la seguridad de los americanos. La desigualdad económica...